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jueves, 29 de mayo de 2014

Camille Saint-Saëns

  Su nombre completo fue Charles Camille Saint-Saëns nacio en París, 9 de octubre de 1835 y murio en Argel el 16 de diciembre de 192, fue un compositor, director de orquesta, organista y pianista francés.
Músico muy dotado, fue un virtuoso pianista y también un excelente improvisador al órgano, espíritu curioso por todo, escritor, caricaturista, gran viajero, Saint-Saëns desempeñó un papel excepcional en la renovación de la música francesa, tanto por su enseñanza (tuvo como alumnos, entre otros, a Gabriel
Fauré y a André Messager), como, sobre todo, por su actividad en favor de la música nueva, fue uno de los fundadores de la «Société Nationale de Musique», destinada a tocar y difundir la música francesa. Puede considerársele un jalón esencial de la renovación que condujo a Claude Debussy y a Maurice Ravel.
Saint-Saëns fue un intelectual multifacético. Desde pequeño se dedicó al estudio de la geología, la arqueología, la botánica y la entomología, específicamente a la rama de los lepidópteros. Fue también un excelente matemático. Además de la actividad musical como compositor, intérprete y crítico, se dedicó a las más variadas disciplinas, y se entretuvo en discusiones con los mejores científicos europeos y escribió doctos artículos sobre acústica, ciencias ocultas, escenografía teatral en la Roma Antigua e instrumentos antiguos. Fue miembro de la Sociedad Astronómica de Francia, poseía un telescopio, y organizaba sus conciertos de tal modo que coincidieran con algunos acontecimientos astronómicos (como eclipses solares). También escribió una obra filosófica, Problemas y misterios, un volumen de poesía, Rimes familières, y la comedia La crampe des écrivains, que tuvo un gran éxito.
Su extensa obra (elaboró más de 400 composiciones, en las que abordó casi todos los géneros musicales) es muy ecléctica, de un gran clasicismo y de una perfección a menudo un poco forzada, lo que ha motivado que se la considere demasiado académica, en Francia, sobre todo. Sin embargo, a menudo es una música de gran belleza, con una gran calidad de escritura. Fue también el primer gran compositor que escribió música para el cine.
Aunque vivió casi siempre en París, se consideraba hijo adoptivo de Dieppe, pequeña ciudad de la Alta Normandía, donde se instaló en 1888. Hoy día su legado se expone en el Château-Musée de dicha localidad, en una sala expresamente dedicada a él, el salón Saint-Saëns.
   Una de las obras mas conocidas es La danza macabra. Saint-Saëns atravesó todo el período romántico; fue uno de los protagonistas de la segunda fase de este movimiento y asistió a su declive en pleno siglo XX. El año en que nació se estrenaron I puritani de Vincenzo Bellini, Lucia di Lammermoor de Gaetano Donizetti y La judía de Jacques Fromental Lévy Halévy; Robert Schumann compuso su Carnaval y Liszt comenzó sus Años de peregrinaje. Felix Mendelssohn, Frédéric Chopin y Schumann habían llegado al cenit de sus carreras. A la muerte de Saint-Saëns ya habían pasado ocho años del estreno de La consagración de la primavera (al que asistió) y tres del fallecimiento de su detestado Claude Debussy; Maurice Ravel —que admiraba a Saint-Saëns por sus dotes de orquestador, ya había compuesto la mayor parte de sus obras mayores, e Igor Stravinski acababa de iniciar su aventura neoclásica con Pulcinella (1920).

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